¿Qué es la lactancia materna?

La lactancia materna es cuando alimentas a tu bebé con leche que sale directamente de tu pecho.

Numerosos expertos médicos, como la Academia Americana de Pediatría (AAP) y el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, recomiendan encarecidamente la lactancia materna exclusiva (sin leche artificial, zumos ni agua) durante 6 meses.

Tras la introducción de otros alimentos, recomienda seguir dando el pecho durante el primer año de vida del bebé.

La frecuencia con la que debes amamantar a tu bebé depende de si prefiere comidas pequeñas y frecuentes o tomas más largas. Esto cambiará a medida que el bebé crezca.

Los recién nacidos suelen querer alimentarse cada 2-3 horas. A los dos meses, es habitual que se alimenten cada 3-4 horas, y a los seis meses, la mayoría de los bebés se alimentan cada 4-5 horas.

Tú y tu bebé son únicos, y la decisión de amamantar depende de ti.

La Extracción de Leche

La extracción de leche puede hacer que las mamás se sientan un poco cómo máquinas de leche. Pero hay buenas noticias si te has comprometido a dar el pecho a largo plazo: Hay algunas formas de hacer que el proceso sea un poco menos… bueno, un poco menos riguroso.

Incluso si piensas dar el pecho de forma exclusiva (lo que se conoce como “lactancia materna”), te conviene tener un sacaleches a mano. ¿Por qué? Es inevitable que tengas que separarte de tu bebé durante más de unas horas seguidas -por ejemplo, cuando vuelvas al trabajo, o tengas que hacer recados o acudir a citas sola- y necesitarás sacarte leche para evitar la dolorosa congestión mamaria.

La extracción de leche también es útil para las madres que desean compartir las responsabilidades de la alimentación con un padre u otro cuidador.

Existen tres tipos principales de extractores:

Extractores eléctricos: Estos modelos se conectan a una toma de corriente y suelen ser los sacaleches más potentes que se pueden comprar. Puedes optar por un sacaleches eléctrico doble, que extrae la leche de ambos pechos al mismo tiempo, o por un modelo eléctrico simple, que requiere que te extraigas la leche de un solo pecho a la vez. (Los sacaleches eléctricos simples son menos eficientes, ya que básicamente duplican el tiempo de extracción, pero suelen ser más asequibles que los modelos eléctricos dobles).

Extractores con pilas: Estos están disponibles en modelos simples y dobles. También hay sacaleches inalámbricos que permiten extraer leche sin necesidad de usar las manos. Los extractores a pilas suelen ser más pequeños y portátiles que los eléctricos, y son ideales si sabes que no vas a tener fácil acceso a una toma de corriente (por ejemplo, cuando vas al trabajo o de viaje).

Extractores manuales: Los manuales se accionan a mano y requieren que la usuaria apriete repetidamente una palanca para crear succión en el pecho y extraer la leche. Estos modelos son ligeros, portátiles y baratos. ¿El inconveniente? Tendrás que hacer tú misma gran parte del trabajo y es posible que no obtengas tanta leche, por lo que es mejor utilizarlos ocasionalmente.

Nutrición durante la lactancia

La nutrición durante la lactancia puede ser confusa. ¿Cuánto debo comer? ¿Qué debo evitar? ¿Cómo puede afectar mi dieta a mi bebé?

Ten en cuenta que puede que necesites comer un poco más -entre 330 y 400 calorías adicionales al día- para tener la energía y la nutrición necesarias para producir leche.

Para obtener estas calorías adicionales, opta por opciones ricas en nutrientes, como una rebanada de pan integral con una cucharada (unos 16 gramos) de mantequilla de cacahuete, un plátano o una manzana medianos y 227 gramos de yogur.

¿Qué alimentos debo comer durante la lactancia?

Concéntrese en hacer elecciones saludables para ayudar a alimentar tu producción de leche. Opta por alimentos ricos en proteínas, como la carne magra, los huevos, los lácteos, las alubias, las lentejas y el marisco bajo en mercurio. Elige una variedad de cereales integrales, así como frutas y verduras.

Comer una variedad de alimentos durante la lactancia cambiará el sabor de tu leche materna. De este modo, tu bebé conocerá distintos sabores, lo que podría ayudarle a aceptar más fácilmente los alimentos sólidos en el futuro.

Para asegurarte de que tú y tu bebé reciban todas las vitaminas que necesitas, tu médico puede recomendarte que sigas tomando un suplemento diario de multivitaminas y minerales hasta que destetes a tu bebé.

¿Qué alimentos y bebidas debo limitar o evitar durante la lactancia?

Ciertos alimentos y bebidas merecen precaución durante la lactancia. Por ejemplo:

El alcohol. No hay un nivel de alcohol en la leche materna que se considere seguro para el bebé. Si bebes, evita dar el pecho hasta que el alcohol haya desaparecido por completo de la leche materna.

Esto suele llevar de dos a tres horas para 12 onzas (355 mililitros) de cerveza al 5%, 5 onzas (148 mililitros) de vino al 11% o 1,5 onzas (44 mililitros) de licor al 40%, dependiendo de tu peso corporal. Antes de beber alcohol, considera la posibilidad de extraer leche para alimentar a tu bebé más adelante.

Cafeína. Evita beber más de 2 a 3 tazas (16 a 24 onzas) de bebidas con cafeína al día. La cafeína en la leche materna podría agitar al bebé o interferir en su sueño.

Pescado. El marisco puede ser una gran fuente de proteínas y ácidos grasos omega-3. Sin embargo, la mayoría de los mariscos contienen mercurio u otros contaminantes. La exposición a cantidades excesivas de mercurio a través de la leche materna puede suponer un riesgo para el sistema nervioso en desarrollo del bebé. Para limitar la exposición de tu bebé, evita los mariscos con alto contenido en mercurio, como el pez espada, la caballa y el blanquillo.

En conclusión podrás darte cuenta que la leche materna exclusiva acompañada de una buena alimentación le dará enormes beneficios a tu bebe como a tu relación con tu hijo en el corto, mediano y largo plazo. Asegúrate de seguir estos consejos que hacemos con mucho amor y cariño.

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